El guión sobre el futuro de Santana y de su parque de proveedores puede ya estar escrito. Solamente faltaría pasarlo a limpio y que se conozca la letra de su escritura. Y por supuesto su contenido, incluida la letra pequeña. Por lo que me han contado algunos de sus trabajadores, por la situación de la empresa, por el contexto de crisis en el que se mueve la automoción y por la escasísima carga de trabajo todo hace indicar que Santana vive un delicado momento como consecuencia de su inactividad.
Prejubilaciones y proyectos industriales de diversificación son, entre otras, las posibles soluciones que se pueden barruntar en el plan industrial, pero ocurre que las elecciones municipales están próximas, por lo que ahora desde la propietaria de la empresa (Junta de Andalucía) se pide paciencia y confianza, mientras que los trabajadores, más allá del ruido que puedan desarrollar, poco pueden hacer a la vista del fuerte y contrastado compromiso económico demostrado por el Gobierno andaluz por mantener abiertas las puertas de esta compañía desde que se hizo cargo de la misma en 1994.
En cualquier caso, sean cuales sean las decisiones que se adopten y el plan de futuro que se ponga sobre la mesa se hace necesario un ejercicio de información y de claridad para conocimiento de los trabajadores y de los ciudadanos, sin marear la perdiz. Es conveniente y es saludable saber qué planes hay con Santana.
1 comentarios:
Totalmante de acuerdo: Santna ya no tiene futuro, al menos como la concebimos en la actualidad. Lo que pasa es que falta arrojo y valentía de los políticos para admitir que la situación actual de dejarla con respirador asistido gracias a las ayudas públicas es insostenible.
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